La enseñanza a distancia ha presentado muchos retos para padres y escuelas alrededor del mundo. Las investigaciones muestran que el tiempo que pasan los niños frente a una pantalla puede tener efectos positivos y negativos, y la transición hacia una educación online ha aumentado el tiempo que pasan frente a sus dispositivos.
De hecho, según un informe de Unicef existe el principio de Goldilocks (‘Ricitos de Oro’), que sugiere que podemos estimular la sociabilidad de los niños a través de la tecnología y que gestionar su comunicación online tiene un efecto positivo sobre la calidad de sus amistades y capital social.
Sin embargo, cuando se sobrepasa el ‘nivel intermedio’, el acceso a pantallas puede afectar a nuestros hijos psicológica y físicamente. Con el Smartphone Blabloo, son los padres los que supervisan remotamente cuánto tiempo pasa su hijo/a frente a la pantalla del móvil desde su propia Parents App gratuita.